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10/06/2019: ¿Se Parece A Jesus? | Sermon por Pastor Tommy Molina
Escritura Clave: Juan 10:9
Yo soy la puerta; el que entre por esta puerta, que soy yo, será salvo. Se moverá con entera libertad, y hallará pastos.
A veces, las cosas más obvias son las que tendemos a minimizar su importancia. Tomemos por ejemplo puertas; entramos y salimos de ellas casi todo el día y todos los días sin prestar mucha atención, a menos que, por supuesto, la puerta esté cerrada. Las puertas nos permiten el acceso o nos mantienen fuera. Para aquellos que creen, las puertas pueden ser una oportunidad para bendiciones o un peligro para pecar. Génesis 4:7 nos dice que “el pecado te acecha en la puerta” y 2 Cor. 2:12 nos dice cómo el Señor “nos abre puertas de oportunidades”.
En las Escrituras vemos continuamente el significado físico y espiritual de las puertas. También conocidas como portón, son el lugar donde se llevaban a cabo los negocios de la ciudad y donde los guardias estaban para protegerse contra los enemigos. Leemos en Génesis cómo la victoria y las bendiciones (Gén. 22:17, 24:60) también significaban poseer las puertas de sus enemigos. Jesús a menudo se refiere metafóricamente a sí mismo como la puerta (Jn. 10: 9) a la salvación e insta a que, si no dejamos de tocar, Él nos abrirá la puerta (Mateo 7: 7-8).
Este mes buscaremos del Espíritu Santo que nos muestre las puertas abiertas en nuestras vidas que nos están contaminando y que necesitan ser cerradas, aprender a poseer las puertas del enemigo y pedirle que nos muestre las puertas al cielo que Dios quiere abrir para nosotros. Jesús quiere que entremos y salgamos libremente a través de “Puertas Abiertas” que nos traerán alimento espiritual (Jn. 10: 9).